La leche evaporada se puede encontrar en supermercados grandes, si no la podéis encontrar se puede hacer en casa, es sólo leche entera pero más concentrada. Se pone un litro de leche al fuego en una cazuela y despues de hora y media aproximadamente quedarán 400 ml, eso sería leche evaporada.
Ingredientes
- 4 cucharadas de azúcar
- 225 g de queso de untar 8 (un paquete)
- 5 huevos
- Un bote de leche condensada (370 g)
- 340 g de leche evaporada (los 400 ml aproximadamente)
- Una cucharada de extracto de vainilla
Lo primero que tenemos que hacer es colocar el azúcar en el fondo de una flanera (si no tenemos flanera se utiliza una cazuela pequeña y alta que se pueda meter al horno) lo ponemos a fuego medio y cuando empiece a fundir vamos dandole vueltas con cuidado (se puede remover con una cuchara) cuando esté todo el azúcar derretido y con color de caramelo lo retiramos del fuego y dejamos que enfríe.
Preparamos el horno, lo encendemos a 180ºC y colocamos una cazuela con unos 8- 10 cm de agua.
En un bol echamos el queso de untar y lo removemos para que quede cremoso, vamos añadiendo uno a uno los huevos y mezclandolos bien con el queso, añadimos la leche condensada, la leche evaporada y el extracto de vainilla y lo removemos bien con unas barillas hasta que quede una masa homogénea.
Volcamos la masa dentro de la flanera con el caramelo y la colocamos dentro de la cazuela con agua que está en el horno. Dejamos que se haga al baño María durante una hora, hay que vigilar que no se nos queme la superficie, si empieza a ponerse dorara la tapamos con papel de aluminio.
Una vez fuera del horno hay que dejarlo que se enfríe durante una hora, luego pasamos un cuchillo por el borde para evitar que se nos pegue y colocamos un plato sobre la flanera, le damos la vuelta y lo desmoldamos. Como todavía estará un poco caliente lo dejamos en la nevera que siga enfriando hasta que lo vayamos a comer.
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