25 febrero 2014

Lasaña vegana

No sigo una dieta vegana, pero creo deberíamos introducir en nuestras dietas más fruta, verdura y vegetales. Siempre nos dicen que hay que comer de todo y poca cantidad de carne, sin embargo nos ponemos a cocinar y podemos hacer primero, segundo y postre con carne animal o grasas animales. Así que de vez en cuando está bien cuidarse un poco y hacer recetas sin grasas ni proteínas animales. Además está muy buena, así que no supone ningún castigo.

Ingredientes
- 2 calabacines
- 400 g de champiñones
- 150 g de soja texturizada fina (se compra en herbolarios y tiendas de dietética)
- 3 dientes de ajo
- 1/2 vaso de vino blanco
- Salsa de tomate (unos 350 ml, la podéis hacer casera o comprarla)
- 2 cucharadas de harina
- 1/2 litro de bebida de soja
- Sal, aceite, pimienta, nuez moscada
- Pan rallado

Comenzamos por lavar bien los calabacines y cortarlos en láminas longitudinales, de un lado a otro, y de un grosor de medio centímetro o menos, vamos a hacerlas a la plancha, así que también se pueden cortar en rodajas, pero va a dar mucho trabajo. Colocamos las láminas en la plancha con un chorrito de aceite (las que entren) y las hacemos bien por los dos lados.

En lo que se hacen las láminas de calabacín a la plancha vamos picando los dientes de ajo y los echamos en una sartén con un chorrito de aceite. Laminamos los champiñones y cuando estén los ajos empezando a ponerse dorados los echamos en la sartén junto a la soja texturizada, la soja al estar deshidratada absorbe muy rápido todo el líquido, así que añadimos el vaso de vino, que desaparecerá en un momento y a partir de aquí que la soja vaya absorbiendo el agua que sueltan los champiñones, así que poco a poco y removiendo. Después de unos 10 minutos añadimos la salsa de tomate y lo dejamos unos 10 minutos más. Salpimentamos.

Ahora hay que hacer la bechamel, echamos en una sartén un chorro de aceite, y cuando esté caliente añadimos la harina, dejamos que se tueste durante un minuto y empezamos a añadir poco a poco y sin dejar de remover la bebida de soja, mejor si la añadimos caliente. La textura y sobre todo el olor es diferente a cuando hacemos una bechamel, cuando ya hayamos añadido toda la bebida de soja salpimentamos y echamos un poco de nuez moscada, lo dejamos en el fuego unos 5 minutos más y apagamos.

Ya sólo queda montar la lasaña, primero una capa de calabacines, les echamos un poco de sal, luego una capa con la mitad del relleno, de nuevo calabacines, sal, relleno, calabacines y por encima echamos la bechamel, como es vegana para gratinar le echamos un poco de pan rallado por encima y lo metemos en el horno a gratinar a unos 220ºC durante unos 10 a 15 minutos, hasta que esté la superficie un poco dorada.





23 febrero 2014

Tarta de queso con chocolate blanco

Esta tarta la hice para el cumpleaños de mi hermano, muchos años menor que yo. Me pidió una tarta de chocolate blanco y lacasitos, así que aproveché para hacer esta tarta. La tarta en sí es sencilla, pero la decoración es muy fácil de hacer y queda muy bonita. Podéis decorar así cualquier otra tarta.

Ingredientes:
- 150 g de chocolate blanco
- 200 g nata montada
- 200 g queso cremoso de untar
- 200 g mascarpone
- 1/2 yogur

- 2 huevos
- Una media y media de harina (la medida es el vaso del yogur)
- 1/2 medida de aceite (mejor de girasol que es más suave)
- 1/2 sobre de levadura
- 1 medida de azúcar
- 6 kitkats
- 150 g de lacasitos

La base la podéis hacer triturando galletas y mezclándolas con mantequilla como en muchas otras tartas, pero yo esta vez quise hacer una base de bizcocho, para eso mezclé en un bol los ingredientes para medio bizcocho, 1/2 yogur, 2 huevos, la harina, la levadura, el azúcar y el aceite, lo mezclamos todo muy bien hasta obtener una masa homogénea. Untamos con mantequilla un molde redondo apto para horno y vertemos la mezcla del bizcocho, lo metemos al horno unos 20 minutos a 180ºC, comprobamos pinchando el centro antes de sacarlo que esté bien hecho.

Dejamos que enfríe el bizcocho y mientras hacemos el relleno. 

Troceamos el chocolate blanco y lo fundimos al baño María, hasta que quede cremoso, mientras que se funde el chocolate montamos la nata (yo lo hice a mano, hacía mucho tiempo que no la montaba a mano y la verdad es que es un momento). Mezclamos el queso de untar con el mascarpone con ayuda de una cuchara, luego le añadimos la nata y mejor cambiar a unas varillas para batir mejor. Agregamos el chocolate blanco y una vez que esté todo bien mezclado le echamos en el molde sobre el bizcocho. Hay que dejarlo enfriar por lo menos unas 6 horas.

Yo como quería que la tarta quedara un poco más alta añadí en total 360 g de chocolate blanco, 400 g de mascarpone y 400 g de queso de untar. Parece un poco raro porque no lleva nada para que cuaje, pero queda bien firme, lo único que si luego la dejáis fuera de la nevera más de 2 horas y hace un poco de calor se os vendrá abajo. 

Para la decoración primero hay que desmoldarla con cuidado, luego mezclamos en un bol dos cucharadas de queso de untar con dos cucharadas de mascarpone y dos cucharadas de azúcar, lo batimos bien y con ayuda de una cuchara untamos todo el borde de la tarta con esta mezcla. Ahora sólo queda partir a la mitad los kitkats y colocarlos por todo el borde y los lacasitos en el centro. Queda preciosa.






18 febrero 2014

Paté de cangrejo

Esta receta es sin duda una de las que más se ha hecho en mi casa desde hace más de 20 años, y como es tan común no me daba cuenta de incluirla en el recetario.
Muy recomendable para niños, más que nada lo digo por mis primos que en alguna comida familar sólo comieron de esto. Ahora todavía hay alguno que sigue

Ingredientes:
- 12 palitos de surimi (mejor del que venden congelado)
- 3 huevos
- 2 cucharadas de tomate frito
- 300 ml de aceite de girasol
- Un chorrito de vinagre
- Una pizca de sal

Lo primero es poner dos huevos a cocer, los colocamos en un cazo con agua salada y cuando rompan a hervir los dejamos 12 minutos.

Aparte tenemos que preparar la mayonesa, se puede hacer con mayonesa de compra, pero he probado de varias maneras y como más me gusta es con mayonesa casera hecha con aceite de girasol. Echamos un huevo en el fondo del vaso de la batidora, le echamos un poco de sal y un chorrito de vinagre, añadimos el aceite, colocamos la batidora en el fondo del vaso y comenzamos a batir, sin mover la batidora del fondo, cuando suba una pluma de mayonesa ya cuajada es cuando subimos la batidora y ya está hecha la mayonesa, sólo hay que mezclar todo bien. Si se os corta la mayonesa sólo hay que echar otro huevo y repetir la operación, a todos nos ha pasado alguna vez. Comprobamos el punto de sal, si la mayonesa está sosa todo el paté quedará soso.

Sobre la mayonesa vamos picando los palitos de surimi y el huevo cocido, con la batidora lo mezclamos todo bien y por último le añadimos el tomate frito, le da un toque de color y de sabor, pero no abuséis por que entonces sabrá demasiado a tomate.

Se sirve con pan tostado, o con el que más os guste.





16 febrero 2014

Tarta de chocolate blanco con frambuesas

Esta tarta se puede hacer prácticamente en el tiempo que tarda en dorarse un poco en el horno la masa. Lo demás es muy fácil, queda bonita, porque las frambuesas tienen un color muy bonito y contrasta con el blanco del relleno.
Sobra decir que si no tenéis frambuesas y tenéis otras frutas a mano se pueden utilizar fresas, moras, melocotón, ciruelas...

Aproximadamente salen unas 8 raciones normales, como es muy fina se come sin darse uno cuenta y queda poco empalagosa gracias a la fruta.

Ingredientes:
- 180 g de chocolate blanco
- 1 lámina de pasta brisa
- 200 ml de nata líquida
- 1 hoja de gelatina
- 150 g de frambuesas para decorar

Encendemos el horno y lo ponemos a calentar a 200ºC.

Colocamos la masa brisa sobre un molde (yo tengo uno redondo y bajito para hacer tartas y quiches), como generalmente todas las masas de compra ya vienen con papel para hornear, así que aprovechamos este papel para colocar la masa sobre el molde y así nos aseguramos de que no se va a pegar.
Al hornear cualquier masa se deforman bastante, así que para que mantenga mejor la forma y sobre todo para que no se caigan los bordes lo mejor es colocar un kilo de garbanzos (sin cocer) sobre la masa, horneamos y luego a guardar los garbanzos para una próxima vez.

El relleno no tiene complicaciones, calentamos la nata en un cazo y ponemos la lámina de gelatina a remojo en agua fría. Cuando la nata esté caliente echamos dentro el chocolate partido en cuadraditos, cuando esté fundido escurrimos la lámina de gelatina y la incorporamos, retiramos del fuego y vertemos sobre la masa ya horneada.

Ya sólo queda echar las fambuesas sobre el relleno, cada uno como mejor le parezca, de forma más ordenada, haciendo alguna figura o de forma aleatoria si os gusta el caos como a mi.






13 febrero 2014

Cocochas de bacalao al pil-pil con pimientos rojos

El bacalao es un pescado que se puede preparar de muchas maneras, pero yo creo que la mejor de todas es al pil-pil por que aprovecha muy bien la gelatina que suelta el bacalao cuando se cocina, y en esta receta es bastante sencillo conseguir una salsa bien ligada y pegajosa.

Ingredientes para 4 personas:
- 800 g de cocochas de bacalao
- 11 dientes de ajo
- 2 pimientos rojos, también se pueden usar pimientos asados, morrones o del piquillo
- 1 cucharada rasa de azúcar
- aceite y sal
- 1 guindilla
- perejil picado

Yo para esta receta utilicé cocochas frescas, así que si las utilizáis conservadas en sal antes de nada hay que ponerlas a remojo en agua durante al menos 8 horas, luego retirarlas y escurrirlas bien.


Lo que más tiempo va a llevar en esta receta es asar los pimientos, así que los limpiamos bien, los secamos y los metemos al horno a 200ºC durante unos 25 minutos, los sacamos del horno y los pelamos, cuanto antes los pelemos más fácil será, pero cuidado que queman. Si queréis utilizar unos pimientos asados de bote ahorraréis tiempo.

Ponemos una sartén a fuego medio-bajo, con un chorro de aceite y 5 dientes de ajo machacados, los doramos un poquito y añadimos los pimientos en tiras, los dejamos que se hagan un poco 5 minutos y les echamos una cucharada de azúcar y una pizca de sal. Los dejamos a fuego bajo durante unos 20 minutos cambiando de posición unos con respecto a otros para que se hagan bien todos.

Pelamos el resto de los dientes de ajo y los cortamos en láminas, los echamos en una cazuela con aceite abundante. Cuando comiencen a dorarse los ajos añadimos las cocochas, y las cocinamos durante 3 minutos, retiramos la mayor parte del aceite y bajamos el fuego, bastante bajo, comenzamos a mover la cazuela donde tenemos las cocochas, estas empezarán a soltar la gelatina que se ligará con el aceite y resulta una salsa espesa un poco parecida a la mayonesa, añadimos un poco más de aceite y seguimos ligando la salsa. Es mejor poco a poco, porque con todo el aceite de una vez es más complicado de ligar. Una vez bien ligada la salsa retiramos la cazuela del fuego, le echamos un poco de sal (si son cocochas frescas) y el perejil picado.

Servimos las cocochas junto a los pimientos, podéis colocar alguno de los ajos que se hicieron con los pimientos sobre las cocochas.


10 febrero 2014

Tarta de castañas

Como el ingrediente principal de esta tarta son las castañas es más propicia del otoño que de cualquier otra época del año, pero ahora podemos conseguir casi de todo en cualquier época, así que hay que aprovechar. Yo utilicé castañas congeladas, sólo hay que pelarlas y congelarlas. El congelarlas es un momento, para pelarlas hace falta mucha más paciencia.

Ingredientes:
- 500 g de castañas (frescas, congeladas o en puré)
- 350 g de azúcar (si utilizáis castañas en conserva o puré mirar a ver si ya lleva azúcar que si le echáis mucha va a ser muy dulce)
- 3 huevos
- 1 cucharada de nata líquida
- Cacao amargo
- Azúcar glas
- Mantequilla (sólo para untar el molde y que no se pegue)
- Harina

Comenzamos por cocer las castañas, en agua salada, unos 20 minutos, pero hay que comprobar que están cocidas. Las retiramos del agua, si son frescas hay que pelarlas, así que paciencia y adelante. 

Una vez que tenemos las castañas cocidas y peladas las machacamos bien hasta convertirlas en puré, lo mejor que podamos, si luego veis que quedan muy grumosas se pasan un poco con la batidora, así que no os preocupéis.

Mezclamos el puré de castañas con el azúcar, las yemas de huevo y la nata, lo removemos bien hasta obtener una mezcla lo más homogénea posible.

Montamos las claras en un bol aparte y las incorporamos a la mezcla con movimientos envolventes siempre desde abajo hacia arriba.

Vertemos la masa en un molde previamente engrasado con la mantequilla y lo metemos al horno precalentado a 180ºC durante una media hora, comprobamos antes de sacarla que está bien cuajada metiendo un palillo o un cuchillo.

Para decorar espolvoreamos un poco de azúcar glas y un poco de cacao por la superficie, si nos ha sobrado alguna castaña también la podemos utilizar para decorar.



06 febrero 2014

Pavlova

Esta vez sí me ha quedado bien, lo había intentado otra vez, pero el resultado no fue muy bueno. El truco es poner el horno muy bajo.

Este postre es típico de Nueva Zelanda, un poquito lejos. Es muy ligero  y por ello debe su nombre a la bailarina Anna Pavlova. Cuando sacas la base del horno no pesa nada, y luego te lo comes sin darte cuenta.

Por fuera es muy crujiente y el interior del merengue tiene que quedar cremoso. Yo hice una tarta pero también se pueden presentar como pasteles que será más fácil a la hora de repartirlo.

Ingredientes:
- 6 claras de huevo

- Una pizca de sal
- 350 g de azúcar extrafino
- 500 g de yogur natural (griego, desnatado...)
- 5 cucharadas de azúcar
- Frutas rojas (frambuesas y arándanos)

Hice una tarta (de mojito) y me sobraron un montón de claras, y como hay que aprovecharlo todo y no iba a hacer ninguna tortilla me decidí a intentar de nuevo hacer una Pavlova.

Comenzamos por montar las claras a punto de nieve, con un poco de sal. Una vez montadas, añadimos poco a poco el azúcar y continuamos batiendo, mejor hacerlo con la batidora y seguir batiendo durante unos minutos hasta que quede totalmente incorporada el azúcar en la mezcla. No pasa nada por batirla de más.

Dibujamos un círculo de unos 24 centímetros en una hoja de papel vegetal y cubrimos todo el círculo con el merengue, con una capa bien espesa, colocamos el resto del merengue por los bordes para que quede hueco en el centro.

Horneamos el merengue en un horno precalentado a 130ºC durante una hora y 20 minutos. Pasado este tiempo el merengue estará seco y lo retiramos del horno. Una vez hecho es mejor esperar a la hora que se vaya a servir para rellenarlo, porque al echarle el yogur se va reblandecer y no quedará crujiente.

Cuando vayamos a servir mezclamos el yogur con las cinco cucharadas de azúcar y lo vertemos en el centro de la Pavlova (se podría rellenar con nata montada, que será incluso más fácil de servir, pero quedará un postre más pesado) Por último, sólo queda decorar con las frutas rojas y servir.




05 febrero 2014

Quesadillas de aguacate y tomate deshidratado

Hace muchos años que recurro a las quesadillas como comida fácil de preparar, muy barata y que le gusta a todos los que comen queso. Si queréis preparar unas cuantas para unos amigos es más sencillo colocar en media tortita queso con champiñones o jamón cocido o bacón, pimientos, cebolla.... lo que más os guste se dobla la tortilla y vamos colocando una al lado de la otra en una bandeja de horno, se dejan en el horno unos 20 minutos a 180ºC y se sirven, se pueden acompañar de alguna salsa mexicana o jalapeños.

Ingredientes para 4 personas:
- 8 tortitas (de trigo o de maíz)
- 2 aguacates
- 200 g de queso rallado 
- Un bote de tomate seco en aceite (también se pueden comprar tomates secos y rehidratarlos)

La receta es muy sencilla, extraemos la pulpa de los aguacates y la machacamos, se oxida muy rápido, así que hay que hacerlo justo cuando se vayan a cocinar o si no hay que regarla con un chorrito de limón. Picamos los tomates.


Colocamos una tortita, sobre esta extendemos la pulpa de medio aguacate, luego colocamos una cuarta parte aproximadamente del tomate picado y sobre el tomate colocamos 50 g de queso (se puede añadir más si os apetece) colocamos una tortita y ya tenemos la quesadilla. Repetimos esto hasta tener 4 quesadillas.

Ponemos una sartén a fuego medio, sin aceite, y echamos una a una las quesadillas, las hacemos primero por un lado y luego por otro, hasta que estén tostadas y se funda el queso.

Se pueden servir con salsa mexicana (cualquiera) y si os atrevéis podéis añadirle junto a los tomates alguna rodaja de chile picante.



03 febrero 2014

Alitas glaseadas

Este es uno de esos platos que gustan a todos, ideal para una cena con amigos, se dejan en el horno un ratito y a disfrutar. Pero hay que comerlas en confianza, que si no con el cuchillo y el tenedor no saben tan ricas. 

En esta receta el único ingrediente difícil de encontrar es la salsa hoisin, pero es fundamental, es el sabor predominante de la salsa, la podéis encontrar en tiendas de alimentación oriental.

Ingredientes:
- 12 alitas de pollo
- 2 cucharadas de salsa de soja
- 1/2 cucharada de azúcar
- 1 cucharada de kétchup
- 3 cucharadas de salsa hoisin
- 1 cucharada y media de miel
- 1 diente de ajo
- Aceite, sal y pimienta

Comenzamos limpiando bien las alitas, hay que arrancarles todas las plumas que puedan tener y para las pequeñitas con ayuda de un mechero se chamuscan un poco. Salpimentamos.

Una vez que tenemos las alitas bien limpias mezclamos en un bol todos los ingredientes de la salsa (soja, azúcar, kétchup, hoisin, miel) por último picamos muy fino el ajo y lo añadimos a los ingredientes de la salsa. Los echamos en una sartén y los cocinamos a fuego fuerte hasta que liguen bien. Si os gusta el picante le podéis añadir un toque de alguna salsa picante, van a quedar más alegres.

Vertemos la mitad de la salsa sobre las alitas, y las metemos al horno, a 180ºC durante una media hora, tienen que estar bien hechas, si las colocamos bien en la bandeja del horno luego será más fácil darles la vuelta una vez pasados 15 minutos.


Cuando estén bien asadas les echamos el resto de la salsa y las servimos. Es recomendable dejar un poco de salsa en un bol y colocarlo en la mesa que siempre hay quien quiere más.