24 noviembre 2015

Syrniki

Este es un plato típico de la cocina rusa, es muy sencillo de preparar y están muy buenos. Se parecen a los frisuelos que se hacían en casa hace años, pero estos llevan requesón. Puedo decir que estos los probó una chica rusa y le gustaron, me dijo que sí se parecían a los originales, así que me atrevo a colgar la receta.

Ingredientes:

- 400 g de requesón o de queso ricotta
- 6 cucharadas de harina
- Un huevo
- 3 cucharadas de azúcar
- Una cucharadita de extracto de vainilla
- Una pizca de sal
- Aceite
- Mermelada o miel para servir

Echamos el requesón en un bol, añadimos la harina, el huevo, el azúcar, la vainilla y la sal, con ayuda de unas varillas manuales lo mezclamos todo muy bien. Quedaran pequeños "grumos" pero no son de harina son de requesón, si realmente quedan grumos de harina hay que mezclarlo todo mejor.

Colocamos una sartén al fuego y echamos un chorrito de aceite, cuando el aceite esté caliente, con ayuda de una cuchara vamos echando porciones de masa en la sartén, cuando estén doraditos por un lado, les damos la vuelta, hasta que estén bien dorados por ambos lados.

Así ya están para comerse, se pueden servir con mermelada, miel, sirope, natillas... Para que queden más bonitos los podemos rebozar en una mezcla de harina y azúcar glass.


Así quedan rebozados con harina y azúcar glass


Así quedan recien salidos de la sartén

23 noviembre 2015

Naranjas rellenas de mascarpone

Esta receta la preparó hace mucho tiempo Julius en su programa de "22 minutos", así que si él preparó un menú en ese tiempo y dentro del menú, incluía este postre, os podéis hacer una idea de lo sencillo y rápido que se hace. 

Ingredientes para 4 personas:

- 2 naranjas
- 2 cucharadas de maicena
- 2 cucharadas de azúcar
- 2 huevos
- 2 cucharadas de queso mascarpone
- 1 chorrito de Cointreau (Opcional)
- Guindas, hojas de menta y azúcar glass para decorar

Lo primero de todo es cortar las naranjas a la mitad y exprimirlas. Van a ser nuestros recipientes para servir, así que intentar cortarlas lo más simétricas posibles y a la hora de escurrirlas, cuidado con romper la cáscara.

Mezclamos el zumo de la naranja con un chorrito de agua, el Cointreau (opcional, se pueden usar otros licores), el azúcar y la maicena, removemos bien.

Echamos la mezcla anterior en una cazuela pequeña y la ponemos al fuego (medio- bajo), incorporamos los huevos y el queso y removemos bien todo con unas varillas, seguimos removiendo hasta que espese.

Retiramos toda la pulpa que haya quedado en el interior de las naranjas y las rellenamos con la crema que hemos preparado.

Ahora sólo queda decorar las naranjas, podemos utilizar las guidas, las hojas de menta y el azúcar glass, o decorarlas con un poco de cacao en polvo, o chocolate fundido, otras frutas... muchas opciones y fijo que se os ocurre alguna mejor que a mi.


Flan de piña

Este flan lo tiene todo, es muy sencillo de hacer, lleva pocos ingredientes y fáciles de encontrar y además está muy bueno. Es bastante ligero, no digo yo que sea dietético, pero comparado con otros postres, es de los que entra bien después de haber comido mucho.

Ingredientes:

- 200 lata de leche condensada
- 1 lata de piña grande + 1 ó 2 latas pequeñas de piña
- 4 huevos
- 1 paquete de gelatina de piña (los 2 paquetes)
- 4 cucharadas (sopa) de azúcar para el caramelo

Comenzamos echando el azúcar en el fondo de una flanera o en una sartén, cuando se haya fundido todo, distribuimos el caramelo por el fondo y las paredes del molde que vamos a utilizar. Si el caramelo queda muy oscuro nos va a quedar una presentación más bonita, pero el sabor será más intenso y no le va tanto a la receta, mejor caramelo no muy oscuro.

Batimos las yemas con la leche condensada en un bol con unas varillas. 

Escurrimos el bote de piña grande y echamos el caldo en una cazuela/cazo pequeño, que colocaremos al fuego, cuando rompa a hervir, retiramos del fuego, le añadimos los dos sobres de gelatina de piña y removemos bien para disolverla.

Mientras esperamos a que hierva el caldo de la piña, echamos las rodajas de piña en el vaso de la batidora y lo trituramos bien, mezclamos el puré de piña con las yemas y la leche condensada. Una vez echa la gelatina, la incorporaremos también a esta mezcla.

Por último sólo nos queda montar las claras a punto de nieve, cuando estén bien firmes, las mezclaremos con ayuda de unas varillas con el resto de la mezcla. Colocamos las rodajas de piña de los botes pequeños en las paredes del molde que vamos a utilizar y vertemos la mezcla en el molde. Lo metemos en la nevera y lo dejamos enfriar unas 10 horas. Sólo queda darle la vuelta con ayuda de un plato o una fuente y servirlo.





17 noviembre 2015

Cerdo parmesano crujiente

Después de mucho tiempo sin publicar menus hechos en 15 minutos por Jamie Oliver, a mi me lleva un poquito más, por lo menos el doble, puedo añadir uno más a la lista de cocinados. Está como todos sus menus muy bueno. Este es muy sencillo de preparar, los ingredientes fáciles de encontrar y el sabor fresco y rico.
Ingredientes:
- 400 g de lomo de cerdo (8 filetes de lomo de cerdo)
- 40 g de queso feta
- 8 lonchas de jamón
- 8 Hojas de salvia frescas (yo las encontré por casualidad, pero se pueden utilizar secas o no añadirlas)
- 4 calabacines
- 4 dientes de ajo
- 1 guindilla roja fresca
- 1/2 manojo de menta
- Aceite y vinagre balsámico

Comenzamos por cortar el lomo, lo cortamos en 8 filetes, esto si nos lo hacen en la carnicería, trabajo que nos ahorramos. Con un cuchillo hacemos una pequeña raja en el centro de cada filete y colocamos en ella un trocito de queso feta. Luego colocamos cada filete sobre media loncha de jamón y doblamos el jamón para cubrir la parte superior. 

Colocamos una sartén al fuego con un chorrito de aceite y hacemos el lomo por ambos lados hasta que quede dorado y bien hecho. Añadimos las hojas de salvia los unos 30 minutos, para que queden crujientes y retiramos todo junto.

Cortamos los calabacines en rodajas finas (con el procesador de alimentos, con una mandolina, o a falta de otro recurso, con el cuchillo, a mi esta vez me tocó cortarlos a cuchillo) Echamos los calabacines en una sartén con un poquito de aceite, a continuación añadimos el ajo machacado y subimos el fuego al máximo. Picamos la guindilla y la mayor parte de las hojas de menta y las incorporamos a la sartén con los calabacines, salpimentamos al gusto y dejamos que se hagan hasta que estén hechos.

Servimos en una fuente los calabacines y sobre estos colocamos el lomo. En la receta original lo acompaña también de arroz, con tomate, un chorrito de limón y yogurt.